Muchas veces me he planteado escribir un libro sobre mi vida. Escribir mis pensamientos desde que tengo uso de la razón. Hay tantas cosas lejanas de las que me acuerdo... Y otras tan lejanas de las que ni me quiero acordar. Mi libro estaría dividido en capítulos no muy largos, pero no se qué pondría en cada uno de ellos. Es decir, cómo los organizaría. No veo muy lógico en mi caso asignarle a cada año de mi vida un capítulo, porque los primeros capítulos estarían casi vacíos y estos últimos años tienen mucho que contar. También tendría que añadir al libro todos los diarios que empecé pero que nunca acabo. Todas las hojas de papel repletas de reflexiones que descansan en el fondo de una maleta, debajo de mi cama. Podría escribir varios tomos sólo con las paranoias que escribo a las 3 de la mañana, cuando no logro conciliar el sueño. Si soy sincera, no estoy segura del contenido de todos esos papeles, ya que tengo la manía de no mirar lo que he escrito el día anterior. A saber. Pero, al fin y al cabo, ahí está la gracia. En escribir lo que a uno se le pasa por la cabeza en un momento determinado.
Volviendo con la idea del libro, también había pensado en narrarlo en tercera persona, rollo una protagonista llamada Andrea y una narradora omnisciente que lo sabe todo (o cree saberlo) sobre ella. Sigo pensando que nunca pueden existir seres omniscientes, que lo sepan todo sobre una persona, ni mucho menos sobre el mundo que le rodea.
Andrea sería una adolescente de casi 19 años, a la que un día se le ocurre la disparatada idea de narrar su vida. Cómo si su vida tuviera algo que la diferenciara de las demás... Cogería la vieja grabadora que su madre utilizaba para grabar las lecciones de la Universidad, y cada día, antes de irse a dormir, encendería el aparato y se pondría a contarle su vida al pequeño artilugio. Para ello, abriría su maletín y sacaría las cerca de 1000 hojas que guardaba en el desde que empezó con aquella 'rutina' de escribir todo lo que sentía. Después de todo, quién sabe, igual alguien en el futuro se entretenía leyendo sus recuerdos...
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